Dicen que la vida es sabia, otros que la vida es como es... lo que nadie discute es la evidencia de que no es lo mismo ponerse a adelgazar cuando tienes 20 años, que cuando tienes 40 (por mucho que sean los nuevos treinta), 50 o 60. Y es que según ganamos años, la desaceleración del metabolismo nos hace quemar menos calorías que cuando éramos más jóvenes, así que el resultado es que nos resulta más fácil ganar kilos... y también más complicado perderlos.
No se trata por tanto únicamente de una cuestión de que resultemos ser más sedentarios o 'movidos', que también, sino que hay estudios que demuestran una realidad incontestable, y es que perdemos masa muscular cada década a partir de los 30 años, que a su vez es reemplazada con grasa, y he ahí un factor clave para que con el paso de los años adelgazar resulte cada vez más y más complicado.
Tal vez te interese: Cómo perder 20kg corriendo
Y es que, como se sabe, los músculos consumen más calorías que las grasas, así que a menos músculo contaremos con un metabolismo más lento y con un menor requerimiento de calorías.
Además, hay que contar con la influencia también, a partir de los cincuenta años, de los menores niveles de las hormonas sexuales como son el estrógeno y la testosterona, un factor que influye a su vez lo suyo en este asunto.
Por eso, si estás más cerca del ecuador de tu vida que de la adolescencia es recomendable que tengas en cuenta estos consejos para que te resulte más sencillo adelgazar. Algunos parecerán básicos, pero eso no significa que no resulten de lo más eficaces.
¿Es o no tu primera dieta?
En primer lugar, no es lo mismo intentar sacar adelante tu primera dieta que llevar ya unas cuántas detrás. Y es que este último caso implicará un mayor esfuerzo porque el cuerpo reaccionará más lentamente a los cambios que introduzcamos. Una posible solución para que esto no sea un obstáculo insalvable pasa por reducir la ingesta de productos como el queso o embutido y comer más grasas saludables a razón de 7 a 10 gramos en cada comida, esto es, el equivalente a una cucharada de aceite de oliva o dos cucharadas de frutos secos, así como alimentos con elevado contenido en fécula, a excepción, eso sí, del pan, en las horas centrales del día.
Sin olvidarse de los vegetales verdes, cuyo aporte de calorías es muy pequeño, por lo que al introducirlos en nuestra alimentación ayudamos a reducir el apetito por su aporte de fibra y agua, favoreciendo también nuestro reto de alcanzar el peso corporal que estamos buscando.
Asimismo, cobra en este apartado importancia el realizar una dieta rica en fibra, concentrando los carbohidratos en el desayuno, ya que nos puede permitir llegar a quemar dos veces más grasa durante el ejercicio, que en aquellas personas que toman una dieta elevada en carbohidratos refinados.
Menos porciones de comida al día
Hablando de comer... has de disminuir la cantidad de las porciones que consumes al día, de lo contrario te será imposible reducir peso. La Organización Mundial de la Salud calcula que las calorías necesarias son de 2.000 a 2.500 Kcal/día para el hombre y 1.500 a 2.000 para la mujer, por lo que algunos expertos llaman a reducir en torno a unas 400 o 500 Kcal/día para que pueda funcionar nuestro reto de bajar unos kilitos, mientras que otros apuestan por una media de entre 150 y 300 o, lo que es lo mismo, el equivalente a la ingesta de un helado diario.
No te saltes comidas
¡Nada de saltarse comidas! No te creas que si lo haces te va a venir bien. No sólo no es beneficioso, sino que lo que conseguirás es descontrolar a tu organismo y no terminarás de quemar las calorías necesarias, además de incrementar las posibilidades de que aumente tu azúcar en sangre.
Importancia de pesas y ejercicio
Anímate a darle a las pesas y a seguir una rutina de ejercicios: no estamos hablando de llegar a los setenta años con la complexión muscular de Stallone o Schwarzenegger, pero a más masa muscular, como hemos visto, más facilidad tendremos para acelerar el metabolismo y, por lo tanto, de perder peso. En este sentido, es muy recomendable seguir unos ejercicios de pesas -como siempre, con el consejo y el seguimiento de un experto- además de consumir más proteína, que no más calorías, y apostar de este modo por el consumo de alimentos como huevos, pescado, carne blanca, legumbre y jamón cocido.
Mantén una buena hidratación
Hemos hablado largo y tendido de cómo y qué comer, pero no podemos pasar por alto un gran aliado a la hora de bajar peso como es llevar a cabo una correcta hidratación. Para quitar kilos de nuestro cuerpo es muy importante hidratarse, ya que nos ayuda a eliminar mejor los residuos del organismo, a reducir la cantidad de sal de nuestra dieta y a consumir más energía, y aunque según nos hacemos mayores solemos tener menos sed, no lo dudes y dale al agua, al té y a las frutas y verduras ricas en agua.
No consumas alcohol
Eso sí, olvídate de beber alcohol, o hazlo de forma muy, muy espaciada. Y es que una sola copa de vino puede tener en torno a 75 calorías, mientras que una lata cerveza puede andar, ojo, más o menos en las 150 calorías.
Y sobre todo, no te agobies ni estreses, siguiendo estos consejos, y con tiempo, seguro que terminarás quitando esos kilos de más que hayas podido ir ganando.
Y por su puesto... Corre
Correr de manera controlada y eficiente junto con una dieta saludable es una de la opciones más baratas de perder peso. Pero ojo... A partir de los 40 especialmente no podemos volvernos locos y empezar a correr de manera descontrolada. Nuestro consejo es que te busques un entrenador personal que te prepare un plan de entrenamiento adecuado a tu condición física y a tu tiempo disponible.
Nosotros te recomendamos Academy Win, la plataforma de entrenamientos online de Runnea que dirige Antonio Bores (entrenador nacional de atletas de Elite y preparador de la selección española de fútbol sala) Su método esta pensado para gente corriente, no profesional y adaptado a la realidad del runner amateur (trabajo, hijos, poco tiempo...)
Leer más noticias de: Entrenamiento