Probablemente tengas entre tus círculos alguna amiga o conocida que siempre dice que come lo que le apetece y nunca engorda. Tranquila, no pienses mal. No está haciendo un dieta milagrosa y trata de engañarte. Seguramente la genética hace que su metabolismo se acelere, vaya a una mayor velocidad y esto provoca un consumo mayor de calorías.
Cada vez que ingieres alimentos o bebes, tu metabolismo entra en funcionamiento para transformar esas sustancias en energía o combustible. La edad, el sexo, el peso y la altura, todos esas variables y algunas más, intervienen en el ritmo de tu metabolismo.
Acelerar tu metabolismo no es un objetivo tan difícil de alcanzar como pudiera parecerlo a priori. Todas las personas contamos con un cierto margen de maniobra para influir en su velocidad. En IronCrowns te contamos una serie de trucos y consejos para que puedas activar más rápidamente tu metabolismo y quemar más cantidad de grasa.
Rutina quema grasa en tu casa
Gana músculo
Necesitas ganar tanto músculo como te sea posible, ya que de esta forma contribuyes a aumentar la base del metabolismo de forma permanente. Cuanto menos músculo tengas, menor será la actividad metabólica. El músculo consume más energía que la grasa. Cuanta más cantidad de músculo tengas, necesitarás que el metabolismo esté más activo.
Además de hacer que estés firma y tonificada, el levantamiento de pesas u otros objetos pesados -si no tienes unas mancuernas en casa pueden servirte un par de tetrabricks de leche- afecta a tus niveles hormonales, ofreciendo a tu cuerpo la habilidad natural para quemar grasa después de que haya concluido la sesión de entrenamiento durante un período de 24 horas.
Come más proteínas
Según los especialistas en la materia, los alimentos ricos en proteínas requieren que tu organismo trabaje más para digerirlos, metabolizarlos y utilizarlos como combustible, lo que implica que consumes un mayor número de calorías para poder procesarlos.
Además, comer la cantidad suficiente de proteínas contribuye a lucir y mantener tu tejido muscular, algo que frecuentemente se pierde cuando la dieta que sigues es baja en calorías o escasa en cuanto a la ingesta de proteínas.
Duerme ocho horas
Según recomiendan los médicos y preparadores físicos, la gente subestima de manera descarada el poder reparador que tiene el sueño. Si no duermes lo suficiente o de la forma adecuada, todo tu sistema por completo, incluyendo los ritmos biológicos, estarán desconectados, lo que afecta negativamente a tu metabolismo.
La falta de sueño o de descanso te puede dejar inactiva durante todo el día, pudiendo llegar incluso a no metabolizar de manera óptima o eficiente la grasa, que puede terminar en tu vientre. Procura dormir, por lo menos, ocho horas por la noche para proporcionarle a tu cuerpo el suficiente descanso y, de esta forma, pueda rendir cada día al máximo nivel aprovechando todo su potencial.
Bebe abundante agua
Durante la época en la que hace más frío y llueve y, al contrario de lo que sucede en verano, no se suele tener tanta necesidad de reponer líquidos. Sin embargo, es un 'must' beber gran cantidad de agua aunque no te apetezca demasiado, tanto en otoño como en invierno, para que tu metabolismo sea robusto.
Un reciente estudio demostró que las personas que beben entre ocho y doce vasos de agua al día, por lo general, queman más cantidad de grasa que las que solamente beben cuatro o menos vasos durante un ciclo de 24 horas. Así que ten esto que te acabo de contar muy presente con el objetivo de activar tu metabolismo y quemar más lípidos.
Comienza bien el día
Una buena y fácil estrategia de poner a trabajar a tu metabolismo desde primera hora de la mañana consiste en empezar el día bien con un completo desayuno o una sesión de entrenamiento. Dependerá mucho de cada persona.
Si prefieres salir a entrenar antes de ir a trabajar puedes optar por ingerir algo de comida pero no demasiada, dejando transcurrir algo de tiempo entre el desayuno y el ejercicio, o bien si te sientes a gusto saliendo a correr en ayunas también puedes hacerlo tomando una serie de precauciones.
Para aquellas mujeres deportistas que necesitan ingerir algo de alimento que les sirva como combustible antes del ejercicio físico, sería recomendable una pequeña taza de café con leche con copos de avena o bien un batido de proteínas.
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