¿Entrenar con calor? Sí, se puede. Cada vez nos queda menos para, si unas nuevas elecciones generales no lo impiden, participar como Runnea Women Team en la próxima edición de la Behobia San Sebastián del 10 de noviembre. Hay entre este grupo de mujeres una ilusión, una fuerza y unas ganas de plantarse en la línea de salida que nada ni nadie va a impedir que afrontemos el reto pase lo que pase o se tenga que celebrar la carrera cuando se celebre. Con el panorama político que tenemos en España, sin gobierno y sin saber si lo habrá en la fecha prevista para la celebración de la carrera, el Club Fortuna, organizador de la prueba, aún no ha tomado una decisión definitiva sobre si mover o no la fecha. Hay mucha gente pendiente de esta decisión, especialmente quienes acuden de comunidades autónomos diferentes al País Vasco o quienes llegarán desde el extranjero.
Nosotras seguimos preparando la carrera como si se fuese a disputar el 10 de noviembre. De todas formas, en caso de moverla a otro día, no sería una fecha muy alejada de la prevista así que seguimos con nuestro plan de entrenamiento.
Hay que seguir entrenando... Aunque haga calor
Yo acabo de volver de mis vacaciones en Málaga y aunque el tiempo de relax ha terminado, me he sentido aliviada al encontrarme en mi casa 18/20 grados por la mañanita. ¿Por qué? Pues porque entrenar a 25 grados aunque sean las siete de la mañana es francamente complicado.
Quienes no estamos acostumbradas a estas altas temperaturas sufrimos de manera extraordinaria cuando no solo cambiamos de ciudad, ambiente o recorridos sino cuando tenemos que enfrentarnos a unos calores a los que no estamos habituadas.
En el norte solemos quejarnos del verano tan cambiante que tenemos, con temperaturas frescas y con lluvias más o menos frecuentes. Sin embargo, para entrenar y mantener un ritmo bueno en los entrenamientos, las temperaturas frescas son gloria bendita.
Desde luego, el calor no puede ser una excusa para suspender los entrenamientos. Hay que adaptarse a la nueva situación y, si se puede, cambiar los horarios de salida a correr.
La noche suele ser bastante más fresca incluso que la primera hora del día y por eso es bastante frecuente ver cómo a partir de las 20.00 los y las corredoras comienzan a salir de todos los rincones y los paseos y recorridos frecuentes se llenan de runners con ganas de kilómetros.
Recomendaciones a la hora de correr con calor
Hay una serie de recomendaciones que nos hacen los profesionales y que debemos de seguir a pies juntillas si no queremos tener problemas durante o tras los entrenamientos. La mayoría son de sentido común pero conviene recordarlas para que las tengamos bien presentes.
Evitar las horas centrales del día
La primera hora del día o la última de la tarde han de ser nuestros horarios de entrenamiento. Correr a medio día, a pleno sol, puede llevarnos a sufrir un golpe de calor e incluso a la deshidratación si no bebemos suficiente agua.
Utiliza material deportivo ligero
Lo mejor es utilizar tejidos y colores que no atraigan los rayos solares. El blanco ha de ser nuestro color del verano para correr. No es conveniente abrigarse demasiado, con una camiseta de tirantes y un pantalón corto es suficiente. Una buena aliada es la gorra que no solo evitará que el sol nos dé directamente en la cabeza si no que nos quitará la luz excesiva en los ojos.
Hay que prestar especial atención también a las zapatillas. El pie tiende a hincharse según avanza el entrenamiento y más con calor. Procura que no te queden demasiado justas y no te aprietes muchos los cordones porque impedirías el normal flujo sanguíneo.
Elige un recorrido en el que haya fuentes
Si no quieres llevar botella mientras corres haz tu entrenamiento por lugares en los que sepas que vas a encontrar fuentes. En verano sudamos mucho más y perdemos no solo agua sino también sales minerales. Es fundamental hidratarse mientras corremos. Os aseguro que una deshidratación es horrible, llega sin que te des cuenta y te lo hace pasar verdaderamente mal además de ser muy peligrosa. Lo digo por experiencia...
Utiliza siempre crema solar
No pienses que por estar en movimiento el sol no te va a atrapar. La crema solar es muy importante para evitar quemaduras y para prevenir el envejecimiento prematuro de nuestra piel. Los y las corredoras solemos tener más arrugas que otras personas. Son precisamente las condiciones meteorológicas, el viento, el agua, el sol, etc, las que van alterando ese órgano tan extenso de nuestro cuerpo que es la piel. No te olvides de protegerla.
Baja el volumen de trabajo
Salvo que tengas un objetivo que cumplir en el verano o en fechas inmediatamente posteriores, esta época del año es un momento buenísimo para bajar la carga de entrenamientos. Leí una recomendación de Martín Fiz que decía que ésta es una etapa en la que en los días de carrera continua pueden compaginar correr y caminar rápido. Es una forma muy buena de no axfisiarse tanto en los entrenamientos y hacerlos más llevaderos.
Recomendaba también que los días que nos dediquemos a hacer series aumentemos el tiempo de recuperación entre una y otra al menos en 60 segundos. En verano el pulso cardiaco se nos dispara más que cuando corremos con temperaturas más bajas así que tengamos en cuenta esta propuesta.
Siguiendo estas recomendaciones podrás disfrutar también de nuestro deporte por mucho que el calor apriete. La Behobia San Sebastian está cada vez más cerca. ¡Seguimos entrenando!
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