Adidas Adizero Boston 12

Las Adidas Boston 12 llegan como una propuesta interesante en el mundo del running. A primera vista, destacan por su diseño estilizado y prometen ser una herramienta polivalente para diferentes tipos de entrenamientos.

Primeras impresiones al calzarte las Adidas Adizero Boston 12

Al calzarme estas zapatillas por primera vez, noto una sensación de firmeza combinada con una sorprendente ligereza. El ajuste es ceñido pero cómodo, aunque la zona del talón requiere de un poco de atención para asegurar un bloqueo adecuado. El sistema de cordones ofrece suficiente flexibilidad para ajustar la presión, pero puede requerir algo de experimentación para encontrar el equilibrio perfecto.

Sensaciones en carrera

Una vez en movimiento, las Boston 12 se sienten ágiles y responsivas. La transición del talón al antepié es suave, gracias a la inclinación lateral del talón y la disposición de las Energy Rods. La mediasuela, combinando Lightstrike Pro y Lightstrike EVA, ofrece una mezcla equilibrada de amortiguación y retorno de energía, lo que se traduce en un impulso eficiente en cada zancada.

Rendimiento a diferentes ritmos

Estas zapatillas brillan en una amplia gama de ritmos. Para entrenamientos lentos y regulares, proporcionan la amortiguación necesaria sin sacrificar la sensación de terreno. En ritmos más rápidos, como series o entrenamientos de tempo, la firmeza y la respuesta se hacen más evidentes, ofreciendo esa sensación de velocidad y eficiencia que muchos corredores buscan.

Recomendación para tipos de corredores

Las Boston 12 son ideales para corredores de pisada neutra que buscan una zapatilla versátil para entrenamientos variados. Dada su combinación de amortiguación y respuesta, son especialmente recomendables para aquellos que buscan una zapatilla para largas distancias o para sesiones de velocidad. Sin embargo, corredores con una pisada muy pronunciada en el talón o aquellos que prefieren un ajuste más holgado podrían necesitar considerar otras opciones.

Durabilidad y calidad de materiales

En cuanto a durabilidad, Adidas no decepciona. La suela de goma Continental asegura una larga vida útil, incluso en condiciones de entrenamiento intensas. El upper, aunque ligero y transpirable, parece resistente y bien construido, prometiendo soportar kilómetros de desgaste.

Lo que más me ha gustado

• Versatilidad en rendimiento: Las Boston 12 brillan por su capacidad para adaptarse a diferentes tipos de entrenamientos. Desde rodajes largos hasta sesiones de velocidad, responden excepcionalmente bien, lo que las convierte en una opción muy versátil.
• Combinación de amortiguación y respuesta: La mediasuela, con su mezcla de Lightstrike Pro y Lightstrike EVA, proporciona una amortiguación cómoda sin sacrificar la respuesta. Esto se traduce en una carrera eficiente y placentera, especialmente en ritmos variados.
• Calidad de materiales y durabilidad: La durabilidad es un punto fuerte, con una suela de goma Continental que promete un rendimiento prolongado y un upper resistente que soporta el desgaste habitual del entrenamiento.
• Una zapatilla para todo: A pesar de su buena amortiguación, las zapatillas mantienen una excelente sensación de terreno, permitiendo una percepción clara y directa que favorece la agilidad y la rapidez en la respuesta.

Lo que menos me ha gustado

• Ajuste del talón y sistema de cordones: El ajuste en la zona del talón podría ser algo más mullido y confortable, requiriendo atención especial para lograr un bloqueo adecuado. Además, el sistema de cordones puede necesitar ajustes frecuentes para encontrar el equilibrio perfecto entre comodidad y seguridad.
• Rigidez inicial: Al principio, las zapatillas pueden sentirse algo rígidas, lo que requiere un período de adaptación. Este aspecto podría ser un inconveniente para runners que prefieren una sensación inmediata de flexibilidad y comodidad.
• Sensación de excesiva firmeza en ritmos lentos: Aunque es una ventaja en ritmos rápidos, la firmeza de la zapatilla puede sentirse un poco menos cómoda en entrenamientos más lentos o relajados.

Las Adidas Boston 12 se presentan como una excelente elección para corredores que valoran la polivalencia y la eficiencia. Aunque su ajuste puede requerir algo de ajuste, una vez solucionado, ofrecen una experiencia de carrera envidiable. Son una opción sólida tanto para entrenamientos diarios como para sesiones más exigentes, haciendo honor a su reputación como una de las zapatillas más versátiles del mercado.

Hay zapatillas que se convierten en verdaderos iconos, y la adidas Adizero Boston 12 es, sin duda, una de ellas. ¿Por qué será que en cada carrera, desde un 10k hasta una maratón, la presencia de las Boston es una constante? Pues bien, tras más de 3 meses corriendo con estas zapatillas, creo que he descubierto el porqué de su popularidad.

Primeras sensaciones: Polivalencia en su ADN

Al calzarte las adidas Boston 12 por primera vez, entiendes inmediatamente su fama. Estamos ante una zapatilla versátil y polivalente, capaz de adaptarse a múltiples escenarios de carrera. Aunque su espuma parece haberse ablandado en comparación con la Boston 11, mantiene una rigidez característica que le confiere una personalidad única.

Ritmos y distancias

La Boston 12 se transforma con el ritmo. A velocidades más lentas, puede parecer algo rígida, pero es al acelerar cuando revela su verdadera esencia. El Lightstrike Pro ocupa un lugar prominente en esta mediasuela, trabajando en armonía con los energy rods, que aportan esa rigidez casi de placa. Es en los entrenamientos más intensos donde esta zapatilla se siente en su salsa, ofreciendo esa rigidez adicional que se traduce en un empuje extra.

Tipo de runner ideal: Enfocada al entrenamiento y a la competición

La Boston 12 está claramente enfocada en aquellos corredores que buscan mejorar su rendimiento. Si bien puede servir para entrenamientos generales, todo en ella grita que está diseñada para corredores experimentados que no están listos para dar el salto a modelos como la Adios Pro 3, pero que buscan un híbrido competente de adidas.

Posible punto de mejora

Si hay algo en la Boston 12 que nos ha dejado queriendo más, es su upper. El mesh utilizado por adidas es rígido en algunas zonas, y la de algo de estructura y soporte en el collar puede ser un problema para los que necesitan mayor sujeción en la zona, especialmente en pistas o zonas con curvas pronunciadas. A pesar de ser liviano y minimalista, su ajuste y comodidad podrían mejorarse.

La Adidas Boston 12 es una zapatilla mixta que brilla en entrenamientos de calidad. Para ritmos lentos hay opciones más cómodas, pero en series rápidas o intervalos, esta zapatilla responde excepcionalmente bien. Su punto dulce se encuentra en la parte delantera, ideal para quienes corren con el medio pie.

Alternativas a la adidas Boston 12

Frente a alternativas como la New Balance SC Trainer v2 o la Hoka Mach X, la Boston 12 puede no ser la más cómoda en el upper, pero supera en reactividad gracias a su combinación de espumas y energy rods. Su suela, casi rozando la excelencia, ofrece un agarre formidable en asfalto, aunque en superficies más irregulares, puede que no te sientas tan seguro.

En resumen: Una opción para el runner todo terreno

En definitiva, la adidas Adizero Boston 12 se presenta como una opción formidable para el corredor popular que busca un calzado versátil. Ideal para entrenamientos a ritmos variados y competiciones donde la reactividad es clave. Aunque puede que no sea la mejor elección para aquellos que buscan ritmos inferiores a 3'30"/km, para el resto, la Boston 12 es una apuesta segura. Con la Boston en tus pies, cada carrera se convierte en una oportunidad para superarte.