Reebok Harmony Racer

En la nueva colección de zapatillas de running Harmony de Reebok, la familia crece gracias a otro destacado miembro como las Racer. Un modelo que trae consigo las mejores prestaciones de su hermana mayor, las Harmony Road, pero que también incluye algunas diferencias y mejoras a tener en cuenta.

Como su propio nombre indica, el apellido «Racer» ya ofrece pistas sobre que este modelo concreto está más enfocado a la competición. Y es que en la nueva colección de Reebok concebida al 100% para running, las Harmony Racer adquieren la condición de zapatilla voladora.

Así, la primera gran diferencia con respecto a las Harmony Road es que las Harmony Racer son un modelo netamente más ligero. Apenas alcanzan los 178 gramos de peso. Y esta destacada ligereza se consigue por medio de una mediasuela con la tecnología 3D LiteStrike, y aunque asegure mayor ligereza, no implica que esto vaya en detrimento de una menor capacidad de absorción de los impactos, sino todo lo contrario, porque las Harmony Racer incluso llegan a superar las Harmony Road en este capítulo.

Otra de las novedades destacadas de las Reebok Harmony Racer está localizada en su suela, que cuenta con el sistema SpeedTac, cuya función no es otra que la de aportar un equilibrio entre tracción y durabilidad.

Por lo demás, el resto de tecnologías presentes en las Reebok Harmony Racer son prácticamente idénticas a lo que se ha visto en las Harmony Road. Esto es, diseño de corte bajo para ofrecer mayor libertad de movimientos, y un corte superior con malla sintética SmoothFuse, que proporciona buena transpiración, óptimo ajuste y ligereza. Además, al reemplazar los costuras por los termosellados, el modelo permite evitar las molestas irritaciones en los pies.

Con todo ello, y su peso de 178 gramos, las Reebok Harmony Racer están orientadas a todo ese pelotón de corredores, de pisada neutra, que necesitan una zapatilla voladora para conseguir alcanzar sus objetivos en carrera.